Pocas mujeres para hablar de mujeres en la ONU
La primera Reunión de Líderes Globales sobre Igualdad de Género y Empoderamiento de la Mujer organizada en la ONU a finales de septiembre duró seis horas, pero comprobar lo lejos que aún queda la paridad solo requería un instante. Hasta 80 líderes proclamaron su compromiso firme con una mayor equidad para la mitad de la población mundial, pero había una sola mujer entre los cinco copresidentes del encuentro.
La cumbre se celebró a 20 años de la histórica IV Conferencia Mundial de las Mujeres en Beijing en 1995. Salvo la directora ejecutiva de ONU-Mujeres y anfitriona del evento, Phumzile Mlambo-Ngcuka, el resto -desde el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, a los gobernantes de los países que han albergado las cuatro conferencias mundiales de la mujer celebradas hasta la fecha (México, Dinamarca, Kenia y China)- eran hombres, como sus predecesores en el cargo. Tampoco abundaron las caras femeninas entre los ponentes, porque la mayoría de los dirigentes son hombres.
La imagen está muy alejada de la paridad plena proclamada como meta para 2030 dentro de la nueva agenda de Desarrollo Sostenible para los próximos tres lustros aprobada el viernes en por la ONU.
Ha habido avances desde que en Beijing se acordara una agenda a favor de la plena igualdad de género, con más presencia femenina en puestos de poder y directrices sobre educación, salud o conflictos armados, pero, como reconoció el presidente chino, Xi Jinping, “queda mucho por andar y tenemos que trabajar sin descanso en pro de la igualdad de la mujer”.
Xi anunció una donación de diez millones de dólares para que ONU-Mujeres siga implementando la Plataforma de Acción de Beijing y programas de capacitación de mujeres en países en desarrollo. Pero no hizo referencia alguna a las numerosas feministas chinas acalladas mediante represión y cárcel en su país.
Leer el artículo completo en El País.