Sobrevivir a la violencia machista y contarlo en una película
La cifra estremece: en los primeros quince días de noviembre ocho mujeres fueron asesinadas en España por su pareja o expareja, según datos del Ministerio de Sanidad. En el mismo mes, el día 7 se celebró la primera Marcha Estatal contra las violencias machistas y se ha estrenado en Barcelona, Madrid y Palafrugell (Gerona) el documental Empieza en ti.
Dirigido por Marta Vergonyós, se trata de un intento de cambiar desde el cine esa terrorífica realidad de la que el número de asesinadas es la cara más cruenta.
Empieza en ti no es, sin embargo, una película más. Vergonyós comenzó el proyecto en 2005 en Palafrugell con un grupo de mujeres que habían sufrido violencias machistas, con la intención de trabajar en su recuperación mediante el arte. Así, el 25 de noviembre de aquel año realizaron una performance en el lavadero del pueblo, una intervención en el espacio público que supuso el pistoletazo de salida.
Diez años después, con la película finalizada y estrenada, su directora reconoce a Diagonal que están «contentas de ver que el documental sirve a otras mujeres, y al público en general, para reflexionar y profundizar en la problemática de la violencia machista y en la capacidad del arte para transformarnos».
Vergonyós explica cómo su trabajo en Empieza en ti ha ido creciendo a lo largo de esta década, un parto muy esperado después de años de contracciones y dilataciones, en sus propias palabras. «Quería hacer una aproximación a través de un encuentro semanal con un grupo de mujeres y ver qué iba sucediendo a partir de la práctica del arte. Después ellas mismas me propusieron hacer una película y empezamos a rodar y a registrar todo lo que hacíamos, como, por ejemplo, las performances en espacios públicos. El proyecto ha variado mucho con los años, ya que le hemos dado el tiempo necesario para que el grupo decidiera hacia dónde se encaminaba; ha sido un proceso colaborativo».
Trailer «Empieza en ti» from Marta Vergonyós Cabratosa on Vimeo.
El documental presenta a cuatro mujeres que viven junto al mar: Pili y su hija Nerea, Juana, Mercedes y María José. Las cuatro habían sido anuladas de distintas maneras por sus parejas. Nerea empezó el proyecto siendo una niña y lo termina siendo una chica que se convierte en pieza definitiva en la realización del filme y que ahora incluso quiere hacer ella misma un documental sobre cómo la violencia afecta a las hijas e hijos.
Vergonyós recuerda que su intención inicial era investigar como artista y cineasta otras posibles caracterizaciones de la violencia machista: «Las representaciones mediáticas tienden a la victimización y lo morboso, y yo quería profundizar en el contexto e intentar sacar otros modelos en positivo y de supervivencia».
Leer toda la información en Diagonal Periódico.