«Ni cuentos con perdices ni novelas rosas» a la hora de amar
Ni cuentos con perdices ni novelas rosas «es el resultado de un análisis e investigación sobre la situación actual en materia de educación e igualdad, concretamente en el alumnado de educación secundaria», explica la presidenta de la asociación feminista Mujeres Jóvenes de la Región de Murcia (responsable de esta iniciativa), Loola Pérez.
Pérez remarca que «en España constatamos cómo a través de los recortes en políticas de igualdad y educación, se ha producido un repunte de la violencia de género, que viene acompañado tristemente por un aumento de los casos en la población adolescente a través de Internet, redes sociales y telefonía móvil», a lo que añade que «este repunte está íntimamente ligado con la reproducción de roles y estereotipos de género; y por tanto, con la escasez de educación en igualdad de los y las más jóvenes».
«Por si fuera poco, la reproducción de roles y estereotipos de género continúa siendo reforzada por la publicidad y medios de comunicación. Ante esto, es necesario que los chicos también aprendan a ser críticos con los materiales audiovisuales», insiste.
«Este hecho mina cualquier crecimiento en materia de igualdad, bienestar y justicia social. Ni cuentos con perdices ni novelas rosas pretende proporcionar pautas necesarias para prevenir la violencia de género e incorporar la educación afectivo-sexual en el currículum desde un modelo integral e inclusivo que no solamente eduque o forme, sino que sobre todo, capacite al alumnado herramientas sociales con las que poder enfrentar de forma autónoma, responsable y no sexista su vida social y personal», indica.
Ni cuentos con perdices ni novelas rosas se estructura a través de tres bloques. El primero se llama Ni chicos malos, ni chicas rotas: la construcción del género en los espacios de sociabilización diferencial. «Trataremos de diferenciar los roles y estereotipos de género, conocer conceptos como androcentrismo y sexismo, entre otros. Diferenciaremos términos como género, orientación sexual, identidad sexual e identidad de género«, comenta Loola Pérez.
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