La educación sobre igualdad de género divide a Perú
El currículo nacional 2017 es una herramienta de trabajo del Ministerio de Educación que postula ocho enfoques para el trabajo en la escuela. Uno de ellos es el de la igualdad de género, rechazado por grupos conservadores —principalmente, evangélicos, católicos y fujimoristas— que exigen retirar la «ideología de género» del documento y aseguran que el ministerio promueve la homosexualidad. Este sábado participan en una manifestación para insistir en su petición. Educación aclara que promueve la igualdad de oportunidades y la no discriminación.
La campaña Con mis hijos no te metas llega a las calles. La manifestación nacional, que rechaza el enfoque de género que plantea el currículo del ministerio, se celebra una semana antes de que empiece el año escolar.
Los activistas, que forman parte de las mismas agrupaciones que una vez al año marchan contra el aborto, colgaron este jueves pancartas en los puentes peatonales de las avenidas más transitadas de Lima para pedir a la población que se sume a la manifestación «contra la ideología de género» y «contra la perversión sexual». Los organizadores usan los colores celeste y rosa en los letreros para, según dicen, mostrar las diferencias entre niño y niña, entre hombre y mujer.
Desde febrero, el Ministerio de Educación ha realizado cinco encuentros en Lima para explicar a los padres de familia que el currículo no va a «homosexualizar» a sus hijos. En uno de estos talleres, celebrado el jueves pasado en la escuela pública Mercedes Cabello, en el distrito del Rímac, participaron padres involucrados en la campaña Con mis hijos no te metas, otros que acusaban a los primeros de querer manipularlos y un tercer grupo que no conocía el documento. Ante el ambiente tenso que generaban quienes acusan al ministerio de «promover la ideología de género», algunas mujeres se retiraron de la reunión.
«La ministra está con un pie afuera y ahora se preocupa por el currículo. ¡La igualdad de oportunidades ya está en la Constitución!», alegaba un padre. María Angélica Alvarado, residente en el distrito de Los Olivos, respondió: «Una cosa es que exista en la ley y otra cosa es que se aplique. Por eso tiene que estar en la educación. En las familias se cree que el chico tiene que ser ingeniero, estar bien vestido y tener un buen teléfono móvil. Y a la chica hay que enseñarle las tareas de la casa y que puede ser secretaria».
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