Nueva Zelanda es diferente: los medios también reaccionaron con prudencia tras el ataque a las mezquitas
Para el resto del mundo, la reacción de Nueva Zelanda ante la masacre de Christchurch ha sido extraordinaria. El asesinato de 50 personas durante la oración de los viernes en dos mezquitas a manos de un australiano blanco y de extrema derecha ha unido a este pequeño país y ha puesto en marcha a un Parlamento que llevaba 30 años dándole vueltas a una reforma de la ley de armas.
Gran parte de esa respuesta se debió al liderazgo de Jacinda Ardern. Pero incluso así, la recepción del público ha sido notable.
Decisiones que en otro contexto político habrían sido polémicas, como cubrirse la cabeza con un pañuelo para reunirse con miembros de la comunidad musulmana de Christchurch o la presentación de una reforma radical de la ley de armas en sólo seis días, fueron bienvenidas y celebradas como gestos apropiados y respetuosos.
Incluso aquellos que votaron por la oposición han elogiado el liderazgo de Ardern. ¿Entonces, la respuesta civilizada de Nueva Zelanda ante la tragedia se debe sólo a un buen liderazgo, o hay algo más?
Los medios de comunicación
Los medios de comunicación de Nueva Zelanda en su mayoría cumplieron con la petición de la policía de no reproducir imágenes del ataque y en su lugar se enfocaron en homenajear a las víctimas. El siguiente viernes, periodistas y presentadoras de televisión recordaron a las víctimas a una semana de su muerte cubriéndose la cabeza con un pañuelo para presentar las noticias.
Neal Curtis, un veterano profesor de medios y comunicación de la Universidad de Auckland, señala que antes del ataque, el racismo y la islamofobia explícitos en los medios de comunicación neozelandeses se limitaban a algunos pocos columnistas y blogueros conservadores. Las noticias para sembrar miedo en torno a los refugiados, especialmente los refugiados musulmanes, no solían estar en las portadas de los periódicos.
Curtis cree que esto en parte se debe a que Murdoch no tiene medios de comunicación en Nueva Zelanda y también a que la comunidad musulmana en el país es pequeña.
«La situación no es como en el Reino Unido, o incluso como en Australia, donde se bombardea a la gente con portadas que siembran el miedo en torno a los inmigrantes y los refugiados, especialmente los musulmanes», afirma Curtis. «Para empezar, Murdoch no tiene mucha presencia aquí en términos de propiedad de medios, y él es el hombre fuerte detrás de todo eso en el Reino Unido y Australia…Así que creo que el tema de la propiedad de los medios es importante».
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