El científico loco y la científica invisible: estereotipos a través de la divulgación
Hasta seis mil estudiantes de la región disfrutaron y aprendieron durante la Semana de la Ciencia con las actividades organizadas por la Unidad de Cultura Científica e Innovación de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM).
Entre el 4 y el 15 de noviembre, más de 70 centros de primaria y secundaria de toda la región recibieron la visita de alrededor de 80 científicas y científicos. Esta ha sido una de las principales iniciativas lanzadas para esta cita cultural por la Unidad de Cultura.
“Como un departamento recién creado, y sin apenas presupuesto, el primer objetivo que nos marcamos ha sido el de divulgar y promover las vocaciones científicas entre los estudiantes”, explica el actual coordinador de este organismo universitario, Alberto Nájera.
Según el también Doctor en Neurociencia, son muchos los profesionales del sector que se vuelcan con la difusión científica pero a título personal, sin reconocimiento ni pago. “A veces nos llaman de colegios o institutos para dar charlas. Desde la Unidad de Cultura propusimos que, si estas actividades las organizaban en torno a la Semana de la Ciencia, es decir, las dos primeras semanas de noviembre, nosotros les daríamos reconocimiento como actividad de la Universidad y, además, cubriríamos gastos como los de desplazamiento”.
Tal y como comenta Nájera, han sido los propios profesionales quienes han diseñado las charlas y actividades con las que difundir la ciencia entre los más jóvenes quienes han participado en iniciativas sobre drones, contaminación, volcanes, antibióticos y hasta sobre los riesgos de las pseudoterapias.
“Han sido los propios científicos quienes han contactado con los centros y les han ofrecido la actividad de divulgación. Era como echar un mensaje en una botella al mar, no sabíamos dónde iba a llegar ni la respuesta que íbamos a tener”, asegura Nájera.
Leer el artículo completo en El Diario.