Sin nombre y sin sombrero: las artistas borradas de la Generación del 27
«¿Por qué no podremos ser nosotras sencillamente sin más, no tener nombre, ni tierra, no ser de nadie ni nada, ser nuestras, como son blancos los poemas y azules los lirios?», escribía Ernestina de Champourcín a Carmen Conde el verano de 1928. Probablemente no podrán citar ni una...